domingo, 27 de septiembre de 2009

Oportunidades perdidas.

Leo en la edición de internet una noticia de El Correo de Andalucía, que me llena de preocupación. Dijo el Rector de la Universidad Pablo de Olavide en la apertura del curso académico que “la falta de agilidad en las administraciones puede llevar a que se pierda una oportunidad única para que el área metropolitana cuente con un parque tecnológico de primer nivel.”

Es decir, el retraso en la gestión de la tecnópolis por parte de los Ayuntamientos de Alcalá de Guadaíra y Sevilla puede hacer que se pierda ese espacio tan necesario alternativo y/o complementario a Cartuja 93. Llega el Rector a decir (ellos, que son siempre tan diplomáticos) que “dada la desidia de las administraciones implicadas –en este caso los consistorios de Sevilla y Alcalá de Guadaíra– el rector abre una vía nueva hasta ahora: la posibilidad de empezar un proyecto de parque tecnológico en terrenos del campus al margen de los comprometidos con estas ciudades”, y cito textualmente.

Hemos oído hablar tanto de ese espacio para la investigación y la tecnología, para la unión de los esfuerzos educativos, investigadores y empresariales, que pensar ahora que todo queda en humo nos debe preocupar.

El problema está en que, si no se aprovechan (y parece que no se han aprovechado) las vacas gordas para generar oportunidades nuevas, no será en vacas flacas cuando se haga. Si nos dejamos llevar por los buenos tiempos sin hacer los deberes, sin aprobar planes de ordenación bien estructurados, sin sanear la economía doméstica, sin crear infraestructuras ambiciosas, cuando nos vemos en esta profunda crisis pagamos esa improvisación en términos de perdida del futuro.

Y para eso no valen solo discursos o propaganda, sino gestión y planificación.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

No hay problemas Paco. Ahora estamos enfrascados en el turismo alcalareño. Vamos a ser la primera ciudad turística de Sevilla. Tendremos la Harinera, las magníficas obras, la plaza de abastos, los mejores equipamientos deportivos, la calle La Mina...
¿A quién le importa un parque tecnológico?

Alma y corazón dijo...

Las oportunidades pasan, y últimamente nos pasan todas, lastima que nuestro ayuntamiento se descabezara durante la pasada legislatura. y la vacas gordas se convertirán en vacas famélicas, si en los buenos tiempos dejamos una deuda de mas 50 millones de euros, a bancos, que pasará ahora que vienen mal dadas.
¿Que mas da invertir de forma productiva, si nadie en el Ayto sabe que es eso?