miércoles, 31 de diciembre de 2008

¿Feliz año nuevo?

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Al menos que sea nuevo, que vaya final ha tenido el muy c......
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jueves, 25 de diciembre de 2008

La crisis, la solidaridad y la caridad

Una vez que nos hemos instalado en la crisis económica en toda su amplitud, ahora toca sufrir las consecuencias, que, como casi siempre, recaen sobre los más débiles. Cierto es que los últimos escándalos financieros, sobre todo el de Madoff, han golpeado a un sector de altísimo poder adquisitivo, entre los que ya hay algún suicidio por la pérdida de 1.500 millones de euros.

Pero son las capas de la sociedad con más necesidades los principales “paganos” de las barrabasadas de algunos por ganar dinero fácil. Así, los que tienen empleos precarios son los primeros en ser despedidos. Los jóvenes en pareja que han sumado sus sueldos “mileuristas” para pagar sus hipotecas, no pueden responder al perder uno de los empleos. O los dos.

En estos días he oído o leído dos noticias sobre Caritas que me han puesto los vellos de punta. Conste que tengo un enorme respeto por la labor que hace esta Organización no Gubernamental de la Iglesia Católica, a la que dan vida muchos voluntarios y voluntarias. Pero algunas alarmas me parecen peligrosas.

Decía hace una semana en la radio el Cardenal Amigo Vallejo que había Ayuntamientos que derivaban casos de necesidad hacia Caritas. Tremendo.

Por otro lado, leí en El Correo que Caritas denunciaba que había casi 1000 familias en Alcalá en situación de extrema pobreza.

Mi reflexión es que los poderes públicos nunca, nunca, deben abdicar de su obligación de atender a quienes lo necesitan. Es en tiempos de crisis cuando la solidaridad debe hacerse patente, más fuerte y perceptible que nunca. Y eso es para el poder central, el autonómico y el local, cada uno en la esfera de su competencia.

Aquí no debe tener sitio la demagogia, el discurso fácil. La primera prioridad debe ser crear empleo o, al menos, frenar su destrucción. Pero al mismo tiempo, hay que poner medios y, sobre todo, recursos, para atender a quienes la propia sociedad aleja de su núcleo.

O sea, Feliz Navidad PARA TODOS Y TODAS.

domingo, 14 de diciembre de 2008

La primera vez


La primera vez siempre es mágica. Es algo soñado, deseado, pero que tarda en producirse. Nos asusta al tiempo que nos ilusiona. Es el desconocimiento, saber cómo es sólo por noticias, por visiones, por experiencias de otros u otras. Pero queremos verlo, sentirlo por nosotros mismos, experimentarlo en nosotros, sobrevivirlo, poder contarlo nosotros.

Bueno, pues ya fue. Sí. Ayer, por primera vez en mi vida, estuve en la nieve. Como suena. Parecerá mentira que a mi edad (edad de la maravillosa madurez, para evitar malos rollos) nunca me hubiera nevado encima. Pero ayer lo probé, me encantó, aunque también nos jodió. Perdón, nos fastidió.

Ayer fuimos un grupo de amigos, encabezados por Venturi y Jose Alarcón, a la sierra a hacer montañismo. Nos dirigimos por El Bosque al Puerto del Boyar, cogimos la ruta hacia Reloj, lo rodeamos e intentamos ir hacia El Dornago. Y allí empezaron a caer copos suaves, que conforme subíamos se iban haciendo mayores y cuajaban. Era precioso, casi mágico, algunos gritábamos de alegría, como niños y el travieso Borreguero incluso tiraba bolas de nieve, el muy….

Como sabíamos que haría mal tiempo, íbamos preparados, con mucha ropa e impermeables. Pero cuando se echó la niebla, terminamos perdiéndonos y tuvimos que buscar una ruta alternativa, ya con una lluvia pertinaz y caladera. Al final llegamos a Benaocaz, empapados, cansados, pero contentos de la aventura. Nos cruzamos con otros montañeros, de Mairena del Aljarafe, y, amablemente nos llevaron a dos al Puerto del Boyar, donde estaban los coches, por Villaluenga y Grazalema.

O sea, un día para relajar y casi olvidar una semana trabajosa, trabajada y viajada. El contacto tan brutal con la naturaleza es impactante y de efectos muy saludables.

Ahí van unas fotos, no muy buenas, del móvil (antes de que se mojara) que permiten imaginar la aventura.

sábado, 6 de diciembre de 2008

El efecto Obama


He hablado anteriormente de Barak Obama, el futuro presidente de los Estados Unidos de América. Realmente pienso que será un hito en muchos aspectos, por la situación que se vive en el mundo actual (crisis económica sin fondo por ahora, varias guerras en el mundo, unilateralismo de USA, países emergentes cada vez más fuerte, una nueva Rusia pujante,…) y por lo que su elección ha supuesto en su propio país, con una participación muy elevada para lo acostumbrado.

Nadie puede predecir que ocurrirá finalmente, será bueno o será regular (incluso malo), pero no se negará que produce efectos singulares. Por ejemplo, la unanimidad en el arco político español sobre las simpatías. Después de escuchar al ínclito Javier Arenas identificarse con Obama, en lo que representa de cambio, todo cabe.

Hay un aspecto, producido antes incluso de su toma de posesión, que llega con mensajes nítidos. La formación de su equipo de gobierno. Algo inusual en nuestro meridiano político. Ha elegido a personalidades fuertes, con prestigio, con experiencia. No ha dudado en incluir a personas de otra opción política (caso de Robert Gates en Defensa, del Partido Conservador), incluso (grave anatema en nuestra pobre cultura política) a sus rivales del mismo Partido, a quien le disputó la candidatura a la Presidencia, Hillary Clinton.

Aquí es más frecuente lo contrario. Al de enfrente, palos, y los nuestros que puedan discrepar, ostracismo. A las trincheras, que vienen los nuestros. Por eso, no vale con hablar bonito de Obama, con decirse y bautizarse como el Obama de… (España, Andalucía o algún pueblo). Hay que ser coherente, valiente.

Hay dos tipos estándar de liderazgo. El corto, que piensa que consiste en ser el más alto del grupo, y si alguien crece más de la cuenta, se le corta por las rodillas, o más arriba. Y el valiente, que piensa que su valor es la suma del valor de sus colaboradores, y que cuánto más valgan éstos, más vale él mismo.

Pero es tan fácil predicar como difícil dar trigo.