miércoles, 30 de julio de 2008

Nuestro (por fín) Castillo


En uno de las primeras aportaciones de este blog hablaba de la importancia simbólica que siempre ha tenido el Castillo de Alcalá para los habitantes. En todos las encuestas que hacíamos en los años 80 (años, por cierto, de serias dudas identitarias locales), aparecía como uno de los principales motivos de preocupación el recinto fortificado.

Estaba yo de Portavoz cuando se produjo la primera cesión de uso, siendo Alcaldesa de Sevilla Soledad Becerril. Y a raíz de ese acontecimiento, se iniciaron una serie de intervenciones de consolidación y restauración que han tenido continuidad, y que han conllevado, además, serios descubrimientos de nuestro pasado, como los baños, o la confirmación de la antigua villa.

Posteriormente, ha llegado la tan ansiada cesión definitiva, que debe llenarnos de orgullo y, también, de compromiso.

Creo que una clara apuesta de ese trabajo fue la colaboración profesional del arqueólogo Enrique Domínguez, siendo Delegada de Cultura y Patrimonio María Jesús Díaz. Eso dio continuidad y carácter más científico a las intervenciones.

Viene esta disquisición porque he leído en Diario de Sevilla un artículo en el que se lee que el Ministerio de Fomento invertirá más de dos millones de euros en rehabilitar dos monumentos sevillanos, el Castillo de Alcalá y la Casa Museo Bónsor en Mairena del Alcor.

Para Alcalá vienen, según esta noticia, la nada despreciable cifra de 356.794 euros, que complementará la inversión municipal. Para Mairena, se destina la cantidad de 1.793.720 millones de euros. ¡Toma ya!

Bueno, no se debe mirar con envidia al vecino, pero que bien nos vendría una cantidad así, de ese tenor, para darle un empujón definitivo a la recuperación de nuestro Castillo.

En fin, sigamos con fe en esa simbólica “conquista”.

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